¡Uff, que frío! Y lo que queda…
Ante esta situación, más de uno decide aparcar por unos meses el uso de la montura, vale ¿Qué hacemos con ella?
Para realizar una larga parada, deberíamos tener una pequeña previsión, por eso de no liarnos más de la cuenta cuando la volvamos a coger. Se trata de unos puntos básicos que favorecerán el paso del tiempo en inactividad.
En primer lugar, vamos a referirnos al motor y sus líquidos. Es interesante, si disponemos de una moto de carburadores, vaciar las cubas para que no se acumule la gasolina y sus residuos, nos evitará problemas en los chiclés al arrancar. Por supuesto para realizar ésto, hemos de cerrar el grifo del depósito de combustible, incluso podemos vaciarlo. El aceite y refrigerante, no tienen porqué causarnos problema alguno por su inactividad, pero has de recordar que éstos elementos también se cambian por tiempo, así que es probable que cuando llegue la primavera y su despertar, ya sea conveniente su cambio. Ésto también es válido para el líquido de frenos.
Otro componente que suele acusar mucho la inactividad es la batería. Desde aquí recomendamos desconectarla, así reducirás su autodescarga y con un simple cargador, antes de que todo vuelva a la vida, volverá a su estado casi anterior al letargo. Por supuesto, si dispones de un mantenedor de baterías, será la mejor opción, así ésta se mantendrá siempre en su estado óptimo. Ah, se olvidaba, si la batería tiene mantenimiento, no cuesta nada hacerle el nivel, antes de pararla.
Neumáticos, tan vitales componentes merecen un trato especial. Se deben guardar en un lugar donde no les toque la luz solar directa, mejor sin humedad y zona ventilada. Pero hay más, a su presión de funcionamiento y que no se deformen, por el propio peso de la moto. ¿Cómo lo podemos hacer? Pues sencillamente una presión una poco superior a la de uso, por ejemplo unos 3 o 3,5 Kg. Sin pasarse. Ésto lo deberíamos complementar con unos soportes o caballetes, que eleven la moto sin tocar las ruedas al suelo, los típicos caballetes de competición o si no disponemos de ellos, siempre nos podemos apañar con algunas maderas y tacos.
Otro punto no menos importante, es la limpieza. Es importante que la montura esté limpia, evitaremos acumulación de suciedad, que se podría traducir en suciedad húmeda y por tanto riesgo de oxidación o corrosión. Un método para evitar la suciedad es protegerla con una funda, pero cuidado, que debe ser algo transpirable, de no ser así, con los cambios de temperatura, fácilmente podría condensar agua en el interior y caer sobre la moto, tanto por la propia humedad ambiente como por los vapores de gasolina aceite, agua, etc. de la propia moto.
En climas más extremos hay gente que protege las parte metálicas más sensibles a la corrosión, por ejemplo los escapes de acero, con una capa de vaselina, para evitar su posible reacción con el oxígeno del aire ¡¡pero hay que acordarse de quitarla antier de arrancar!!
Aquí están los puntos más importantes de la hibernación. El último punto será el “despertar”, pero para eso aún quedan algunos meses.